sábado, 31 de octubre de 2009

EL G20 Y LA GASTRONOMIA: cómo comer un rico pollo


Había un cocinero al que llamaremos “Democrático”. Democrático preguntó a las aves que iba a cocinar, con qué salsa querían ser servidas. Un pollo que estaba sentado al fondo, le gritó: “No quiero ser cocinado” y el cocinero replicó: “Esa cuestión está fuera de orden” (1). Pero ¿Qué tiene que ver la gastronomía con el G20? Eso lo intentaremos responder al final de la nota.

Bueno, como todos sabemos, porque todos sabemos, ¿no? El G20… el G20, me suena... Es algo importante, ¿verdad?, bueno eso hemos oído por ahí, sí, en la televisión, en los diarios. Está bien, entonces, ¿qué diablos es el G20? Es una reunión de 20 países, que representados por sus gobernantes, discuten y dan directivas sobre la economía, las finanzas, la política y hasta el clima mundial. Pero, ¿cómo 20 países pueden deliberar sobre el destino del mundo?, pero ¿quién eligió a esos 20 países? Respuesta, NADIE. Así es, se eligieron solitos.

Ahora que vivimos “globalizados”, donde todo tiene que ver con todo, donde el simple aleteo de una mariposa en Asía (2) (Eisha) puede ocasionar un tornado en Tangamandapio (3), las cumbres “G” están de moda.

Existen desde las G’s más pequeñas, por el número de países que la integran, no así por su peso en la escena internacional. Tal es el caso del “G2”, grupo de dos, que reúne en conversaciones bilaterales a los capitalistas Estados Unidos de Norteamérica (EE.UU.) y la China “comunista” ¿Alguien duda de la existencia real del “comunismo chino, me olvidaba, de mercado? Hay que decir que; de comunismo sólo le queda su gran historia. Actualmente, estos dos gigantes capitalistas son grandes socios en los negocios, debido -en parte- a que la China es uno de los mayores tenedores de dólares y papeles de deuda (bonos del tesoro) de los EEUU.

Otro G, un poco más antiguo, es el G7+1, o también llamado G8. Conformado luego de la caída del bloque de países que representaban al denominado “socialismo real”. Este G reunía a las mayores economías capitalistas del planeta en los años 90 (EEUU, Japón, Inglaterra, Alemania, Francia, Canadá, Italia + Rusia). Este G8 se encargó de imponer y extender los dogmas neoliberales por todo el planeta: culto al mercado y las privatizaciones, reducción del Estado y el Gasto Público, apertura comercial, entre otras medias. Estas medidas, por cierto, fueron difundidas entre los países emergentes y en vías de desarrollo, o tercermundistas, pero nunca fueron aplicadas entre los miembros del G8.

Para algunos, idealistas y/o “pasadistas” (4) de buen corazón, existe un gran G, donde están representados casi todos los países del planeta (194): la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Esta organización creada luego de la Primera Guerra Mundial, ha sido dejada de lado en todas las conversaciones y medidas adoptadas para afrontar la crisis financiera y económica de 2008, la mayor desde 1929. La ONU se ha convertido en una organización anacrónica, pasada de moda. Con la caída del bloque “socialista” los EEUU ya no tienen necesidad de sentarse a negociar, pueden hacer y deshacer sin rendir cuentas a nadie, pueden invadir Irak, por ejemplo, sin contar con el aval de la Asamblea General.

La verdad es que existen otros G’s en el mundo, pero por una cuestión de espacio y para no aburrir más, sólo menciono los que considero más importantes para ejemplificar los cambios sucedidos en la geopolítica mundial. El cambio en la correlación de fuerzas a nivel mundial, esto ha significado la puesta en escena del actual G20.

Como dijimos al inicio, el G20 es una reunión de países, incluye a los integrantes del G8 más algunas otras economías desarrolladas como: España, Corea del Sur, Australia. Otros países, llamados emergentes, de gran territorio, con un peso económico importante como productores de materias primas y factorías, proveedoras de mano de obra barata para los países desarrollados. Destacan netamente, por su tamaño y población, la China, hoy en día tercera economía mundial, en términos de PIB, y la India. Ambos gigantes tienen poblaciones que superan los 1000 millones de habitantes cada uno. Hay también tres países latinoamericanos en la reunión: Brasil, México y Argentina. Otros países invitados son Indonesia, Arabia Saudí, Sudáfrica. Y hay que resaltar la participación de la Unión Europea como un miembro más.

Otro dato importante: esta cumbre no es tan reciente como podríamos pensar, se creó en 1999 en Berlín, con la finalidad de discutir sobre la economía y las finanzas internacionales. De ahí que cada país estuviera representado por sus ministros de Economía y Finanzas, así como los presidentes de los bancos centrales. A pesar de una década de existencia, no tuvo mayor notoriedad sino hasta que estalló la crisis financiera mundial. En lo que va del 2009 se han reunido dos veces, primero en Inglaterra, a inicios de año, para evaluar las medidas a tomar en las finanzas y economías mundiales. La segunda reunión se desarrolló a fines de septiembre en Estados Unidos, en Pittsburgh, para evaluar el resultado de las medidas adoptadas. Allí, los países fueron representados por sus gobernantes en persona. Este hecho le otorga mayor relevancia al cónclave.

El G20 es expresión de una nueva correlación de fuerzas en la economía mundial. Esta nueva distribución del poder global obliga a las mayores potencias mundiales (países desarrollados, EEUU principalmente) a reunirse y negociar con aquellos que tengan algún nivel de poder para oponerse a sus intereses (países emergentes, gigantes, China principalmente). Pero toda estructura de poder económico, requiere una estructura política acorde. Y toda estructura política necesita de la fuerza coercitiva de las armas y la violencia como recurso para imponer intereses políticos y económicos. Recordemos que todos los imperios económicos, siempre han tenido armadas poderosas para hacer valer sus intereses.

Finalmente, ¿qué tiene que ver el G20 y la gastronomía? Bueno, ahora cuando la gastronomía esta tan de moda, surgen muchos más aprendices de cocineros. El G20 es un gran congreso de cocineros decidiendo sobre las recetas a poner en el fuego, para devorar todas las aves que en el mundo habitan, pero también para evitar que los cuchillos puedan volar en la cocina..

NOTAS

(1) Adaptación de una conferencia de Eduardo Galeano en Italia
(2) Nos referimos al continente asiático, como sabemos el más poblado del mundo. Aunque también se puede aplicar a la exclusiva zona comercial, formadas por el Sur Plaza Boulevard y el Boulevard Ibiza. Zona predilecta de veraneo de la Gentita Limeña (clase media alta), se ubica en el kilómetro 110 de la Panamericana Sur.
(3) Tangamandapio, pueblo mexicana ubicado en el estado de Michoacán, al suroeste de México. Pueblo de donde es originario Jaimito, el Cartero de la popular serie el Chavo del 8.
(4) “Pasadistas” término tomado de J.C. Mariátegui para designar a los que viven añorando el pasado, queriendo volver en el tiempo y olvidando la construcción del presente y el futuro.

lunes, 12 de octubre de 2009

PREMIO NOBEL DE ECONOMÍA 2009... And the winer is

Oh sorpresa, dos norteamericanos ganan el Premio Nobel de Economía 2009, Elinor Ostrom y Oliver E. Williamson. Un momento, Elinor Ostrom, si, es cierto, una mujer premio nobel de economía. En otras disciplinas como química o medicina, ya varias mujeres habían obtenido este premio. La pregunta es, por qué se demoraron tanto en la economía, considerando que este premio es entregado desde 1969. Otra economista destacada, qué para muchos mereció el Premio Nobel fue Joan Robinson, una keynesiana de izquierda, perteneciente a la Universidad de Cambrige. La razón de que Joan Robinson no alcanzara este premio radican en su condición de mujer y para colmo de males de izquierda.

miércoles, 7 de octubre de 2009

A pesar del G20… Hasta siempre Mercedes

Hace una semana quería escribir sobre lo que significaba el G20, sobre la importancia de la cumbre de las mayores potencias imperialistas, antes reunidas en el G7 (EEUU, Japón, Alemania, Inglaterra, Francia, Canadá e Italia), que luego devino en G7 + 1, o simplemente G8, por la inclusión de Rusia, más por su peso militar que por el económico. En el G20 se reúnen otras economías industrializadas, como España, Australia, Corea del Sur, y algunos países denominados emergentes, entre los que destacan los gigantes China, India y Brasil. En ese momento, mis interrogantes giraban en torno a la nueva configuración del poder en el mundo, la nueva correlación de fuerzas, la nueva geopolítica mundial. En cómo el capitalismo agonizante intentaba salir, una vez más, de otra de sus crisis cíclicas o, debería decir, crónicas.


Al interés anterior se sumaba que, el 1ero de octubre se cumplió 60 años de la fundación de la República Popular China. Fue en 1949 que el Partido Comunista de China, dirigido por el Presidente Mao Tse Tung, inició la construcción del socialismo en un país gigante en extensión, en diversidad cultural, en diferencias étnicas, en número de habitantes, el reto era titánico. La China era un gigante miserable, pero siempre codiciado por las potencias imperialistas, principalmente por el Japón. Hoy día, 60 años después, la China se sienta en la mesa con las potencias imperialistas y es escuchado, y también, impone condiciones. Aunque la potencia, hoy capitalista, trate de ocultarlo, las raíces de este progreso se hayan en la revolución socialista, sin ella la China continuaría siendo un país sometido y pobre.


De pronto, en medio de toda esta información económica, política, aburrida, para algunos, me encontré con una triste noticia, Mercedes Sosa, la cantautora argentina y latinoamericana se encontraba hospitalizada y el pronóstico era desfavorable, horas después se supo que “La Negra”, una persona honesta, íntegra, comprometida con los ideales de justicia social, había muerto. Esta muerte me afectó, me hizo pensar sobre, lo que significa vivir, y para qué vivir. Es verdad, todos morimos, pero hay algunas muertes que duelen más que otras, que pesan más que otras, parafraseando a un filósofo chino.


Con la partida de Mercedes Sosa, me preguntaba, qué artistas nos quedan, qué artistas comprometidos con algo más que vender discos, con algo más que llenar conciertos, con algo más que el mercado y llenarse de fama y dinero. Artistas comprometidos con un futuro mejor. Quiénes son los artistas militantes que nos quedan en esta trinchera, que es el arte. Hablo de aquellos artistas comprometidos con el arte, con la belleza, con el sentir del pueblo, que se revelan ante un sistema que oprime, que embrutece, que animaliza. El arte, estoy convencido, si es verdadero, debe liberar, debe sensibilizar, debe elevar el espíritu, sin llegar a ser panfletario, casi sin proponérselo. Simplemente se trata de ser coherente y consecuente con lo que es justo.


En el momento que se celebraba la cumbre de Pittsburgh del G20. Tenía la necesidad de ordenar mis ideas, una necesidad personal de saber en qué mundo estamos viviendo. Algo así como re-tomar la consciencia, dejar atrás el día a día. Utilizando la categoría hegeliana, dejar de ser una cosa o “ser en sí”, para tratar de ser, en un “ser para sí”, un ser consciente de su realidad. Pero esta toma de consciencia no puede ser un hecho pasivo, uno no puede ser consciente, ver que las cosas no van bien y no hacer nada, bajar la mirada y mirarnos el ombligo, mirar sólo nuestros problemas, porque estos no existen, si no es relacionados con los problemas de los demás.


Hoy la velocidad con la que vivimos, el sistema de in-competencia de mercado que “cosifica”, que deshumaniza, nos impide ver más allá de las necesidades inmediatas individuales. Nos impide pensar con cabeza propia, nos impone las “verdades” universales, irrefutables, irrebatibles, infranqueables. Se nos impide ver la belleza, ver el futuro luminoso, por eso, la necesidad de artistas que nos ayuden a abrir los ojos, por eso, la partida de “La Negra” Mercedes Sosa, nos duele mucho más.